lunes, 31 de octubre de 2022
Gigantes
No sé si dentro de todos nosotros habita un gigante. Un gigante que quiere serlo, que quiere nacer y alcanzar el cielo con las manos. Pero, ese gigante, en ocasiones, no encuentra la forma de crecer y siente frustrados sus anhelos. Yo me siento afortunado con mi tamaño. Apenas un metro setenta. Nada en comparación a los jóvenes de hoy que parecen verdaderos atlantes. Con el paso del tiempo, he ido adaptando mis pretensiones para acompasarlas a mi realidad de cada día. Me he perdido, como todo hijo de vecino, por caminos de grandeza hasta reecontrarme entre las hojas de miles de libros. Han sido los libros, y mi entrega al trabajo, los que me han ayudado a encontrar mi sitio y valorar mi tamaño; un tamaño que va más allá de centímetros, de kilómetros, o de euros. Ayer, en Cehegín, un pueblo de mi querida Murcia que aconsejo visitar, me encontré con estos gigantes que me saludaron animosamente al pasar. Yo creo que me confundieron con otro.
Te saludaron porque te reconocieron al pasar.
ResponderEliminarUna abrazo.
De esos gigantes —y cabezudos— también tenemos por estos lares (Zaragoza).
ResponderEliminarUn abrazo.