Estoy demasiado pensativo. No es algo extraño en mí, pero cuando me sumo en este trance de manera tan continuada significa que algo en mi cabeza se está cociendo a fuego lento. Vivo absorto contemplando el escenario distopico en el que nos ha tocado vivir. Maquino teorías, conjeturas y suposiciones sin llegar a emular a Miguel Bosé. Sufro con el sufrimiento de los demás como si fuese el mio propio. Lucho lo indecible por ganarle la batalla al pesimismo. Me enfrento con mi silencio contra todos los que pretenden medrar con la confusión y sacar réditos del dolor ajeno. Y, entre tanto, me entrego al egoísta oficio de motivador: auxilio para auxiliarme, empujo para que me empujen hacia el camino de la subsistencia.
A mi memoria viene la crisis del 2008 y me veo rememorando la épica lucha de aquellos años. De aquella salimos. De ésta, también.
Defendamos nuestra capacidad de sentir esperanza.
ResponderEliminarÁnimo y abrazos.
Saldremos, seguro, ya verás...
ResponderEliminarUn saludo
Me quedo con el final: saldremos.
ResponderEliminarEso espero. Un beso.
ResponderEliminarSiempre se sale, algunos mejores, otros peores, algunos más ricos, otros más pobres. Como quien dice lo normal.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Me alegro que no llegues a emular a Miguel Bosé, Jfbmurcia, sería demasiado. Todos estamos pensativos y cociendo suposiciones pero como dices "De ésta saldremos" ¿Cómo? Eso es otro cantar. Un saludo.
ResponderEliminarClaro que se saldrá. Con esfuerzo y adaptación.
ResponderEliminarSalu2.