Salir por esos mundos de Dios tiene esas cosas, te encuentras de todo por ahí. Pero sin lugar a dudas, las iglesias mexicanas se llevan la palma en cuanto a sorpresas. En la catedral de la Ciudad de México, hay muchisimas cosas que nos podrían sorprender. La verdad es que en México el sincretismo es algo alucinante. Comenzando con la Santa Muerte, los castigos a los santos, iglesias desacralizadas llenas de chamanes haciendo rituales de magía blanca dentro de ellas,etc,etc.
En esta última visita, me llamó la atención las ofrendas de candados a San Ramón Nonato. La cosa en cuestión es que cuando a alguien se le esta criticando o difamando, o simplemente se va diciendo por ahí que es un cabrón o un hijo de la gran puta, estos vienen a postrarse ante el citado santo de origen catalán, le rezan diez o doce o quince padres nuestros con sus respectivas avemarías y colocan un candado en un armatoste que han colocado para tal efecto a los pies del santo. Como habrá gente incredula que no me crea, hay coloco la foto.
Justo a la derecha de la entrada principal de la citada catedral, existe un tablón donde la gente realiza peticiones diversas, para recuperar la salud, encontrar a algún desaparecido, conseguir un trabajo. La verdad es una suerte tenerlo todo al alcance de la mano, por muy dificil que parezca. La gloria divina, la salud, el amor.
La iglesia venía a representar algo así como un banco, un hospital, un centro comercial, los servicios secretos y el gobierno, todo en uno.
Increible.
Si bien es cierto que para los extranjeros latinoamerica no es mas que un baul relleno de cosas increibles, esta parte del mundo no deja de ser mas que un monton de gente buscando hacideros de fe y monumentos a la enorme estupidez de la idiosincracia latinoamericana
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