Kathy es una profesora colombiana que ama a su país con todas sus fuerzas. Se entrega a él con su trabajo diario, intentando inculcar, en cada alumno, el orgullo de ser colombiano y lucha por dibujar en sus mentes el futuro de una Colombia mejor.
Al parecer, este año, ha organizado un baile con sus alumnas -a las que adora como si fueran sus propias hijas- un baile típico colombiano, como no podía ser de otro modo.
Viendo el vídeo, que ha colgado en YouTube, no he podido dejar de fijarme en las caras de esas lindas jovencitas y he apreciado en ellas la pureza de sus sonrisas y la esperanza de sus miradas.
Por sus comentarios en la entrada anterior, que dediqué al pintor colombiano Willy Ramos, algo me dice que le toqué, malamente, la fibra patriota. Algo de mis comentarios no llegó a cuadrarle demasiado. No fue mi intención hablar mal de Colombia ni de los colombianos. Todo lo contrario. Para mí, Colombia es un país admirable, que afortunadamente ya he visitado en dos ocasiones y por el que siento un profundo y enorme respeto.
Lo que es evidente y admirable para mí, es que Colombia cuente con maestras y maestros como Kathy, que se implican, en cuerpo y alma, por la educación de sus alumnos.
La cultura es lo más grande que un país puede legarle a sus hijos y Kathy lo sabe muy bien.
Al parecer, este año, ha organizado un baile con sus alumnas -a las que adora como si fueran sus propias hijas- un baile típico colombiano, como no podía ser de otro modo.
Viendo el vídeo, que ha colgado en YouTube, no he podido dejar de fijarme en las caras de esas lindas jovencitas y he apreciado en ellas la pureza de sus sonrisas y la esperanza de sus miradas.
Por sus comentarios en la entrada anterior, que dediqué al pintor colombiano Willy Ramos, algo me dice que le toqué, malamente, la fibra patriota. Algo de mis comentarios no llegó a cuadrarle demasiado. No fue mi intención hablar mal de Colombia ni de los colombianos. Todo lo contrario. Para mí, Colombia es un país admirable, que afortunadamente ya he visitado en dos ocasiones y por el que siento un profundo y enorme respeto.
Lo que es evidente y admirable para mí, es que Colombia cuente con maestras y maestros como Kathy, que se implican, en cuerpo y alma, por la educación de sus alumnos.
La cultura es lo más grande que un país puede legarle a sus hijos y Kathy lo sabe muy bien.
Gracias jose, gente como tu españoles, italianos, belgas no importa de que nacionalidad sean es los que queremos sorprender con nuestras riquezas, pero la verdad amigos como tu son los que queremos esn estas tierras por que su valor supera cualquier objeto, va mas alla de cualquier discurso personas como tu son las que hacen grande al mundo.... y de nuevo gracias jose y tenias toda la razon me gusto mucho.
ResponderEliminarmi pequeño gran artista