miércoles, 17 de enero de 2024

El calentón

-¿Anacleto, puedes venir un momento? -le preguntó Fermín. -Dime Fer: ¿qué necesitas? -¿Tú sabes contar? -le preguntó su amigo Anacleto, con cara de pocos amigos. -Claro, sabes que lo mío son las matemáticas. -No, no me refiero a contar números, me refiero a contar historias... -Ah, claro, perdona, pensé que era una cuestión de cuentas no de cuentos -le respondió Anacleto. -¿Y me podrías contar que rollo te llevas con mi mujer? -le inquirió Fermín. -¿Pues no sé de qué va ese cuento, ni quién te lo habrá contado, Fer -respondió Anacleto. -No te hagas el listillo. Lo sé todo -exclamó Fermín, visiblemente alterado. -¿Y si lo sabes todo, qué es lo que tengo que contarte? -le contesto su amigo. -¡Como te acerques otra vez a mi esposa te voy a dar una hostía que se te va a parar hasta el reloj! ¿Me has entendido, mamón? -La fiesta de la empresa se nos fue un poco de las manos. Bebimos demasiado. Pero te juro que estamos muy arrepentidos y que no hay nada entre nosotros. Fue solo un calentón... Y entonces fue cuando Fermín, en un arrebato de locura, agarró una pantalla de ordenador, y la rompió en la cabeza de su amigo. Fermin está detenido, a espera de juicio, y Anacleto criando malvas. Las cosas siempre pueden ir a peor.

jueves, 11 de enero de 2024

Evolución

Rompe la horma. Cambia de forma. Deja atrás todo lo que te obstruye. Si lo intentas en serio, verás como lo nuevo fluye.

jueves, 4 de enero de 2024

2.024

Recuerdo que de pequeño -hubo un tiempo lejano en el que fui pequeño- me aterraba el año 2.000. El cambio de siglo era un territorio desconocido, abrumador, e inquietante. Llegué a él a la nada despreciable edad de 32 años. Ahora, unas cuantas batallas después, llego al 2.024. Haber llegado ya es un logro. Seguir escribiendo es desfachatez. Seguir soñando es infantil. Pero, pese a todo, lo sigo haciendo. Sigo viajando y admirando el mundo. Sigo creyendo que las cosas pueden mejorar. Sigo soñando, tal vez por simple autodefensa, que la paz y la cordura conquistaran el mundo. Sigo. Sigue. No te pares: "Camarón que se duerme se lo lleva la corriente".