martes, 10 de septiembre de 2024

Mitologías imperfectas

La historia tiene muchas lagunas y muchas mentiras. Lo sé porque me lo dijo un historiador, sin estudios oficiales, pero historiador, según él. Un historiador-investigador de sus propias historias y teorias acusado por la oficialidad de ser un impostor y un embustero. Sin embargo, yo le creo. Él me hizo reflexionar de una manera muy contundente: -Pepe, si los sucesos del presente, dependiendo de quién los cuente, son de una manera o de otra, ¿qué no harán cuando nos cuentan el pasado? ¡Todo es un invento, Pepe! ¿Sabes la de veces que se ha reescrito la historia? Ganan unos, y la cambian. Ganas otros, y la cambian. Pues imagínate eso durante siglos y siglos. Y ahí fue cuando bajé la guardia y me contó su teoría sobre la mitología tartésico-murciana. Murcia fue la cuna de los tartesos, y no Andalucía Occidental -me explicó. Las minas de plata de Cartagena y Mazarrón fueron determinantes para que un pueblo como el Tarteso, tan amante de la plata, se asentara aquí. Eso y la belleza de sus mujeres. Y de la riqueza de sus aguas, de la abundante caza de sus montes y por disfrutar de un clima extraordinario. El rey que dominó Tartesos, mil años antes de Cristo, se llamaba Argantoufo, y su bandera de color blanco estaba engalanada con una figura mitologíca a la que llamaban "Equilion" mezcla bestial entre un león y un unicornio. En el castillo del rey vivía el único ejemplar vivo de la especie, que, según parece, tenía una inteligencia desmedida, y la capacidad de hablar como una persona. El problema vino cuando un terrorista enviado por los griegos, introduciéndose por la noche en el palacio, mató al "Equilion" y le arrancó el cuerno. Después de aquella deshonra el rey Argantoufo cayó en desgracia y, al poco tiempo, murió afectado por las fiebres tifuideas. La sabiduría del "Equilion", con toda probabilidad, habría hecho prosperar al pueblo Tarteso, y su muerte, y la del propio rey Argantoufo, marcaron el declinar de todo un pueblo. Yo no supe qué decir. No conozco la historia. Solo asentí con la cabeza y nos tomamos otras dos cervezas. En aquel chiringuito de Bolnuevo hacia más calor que en el mismísimo infierno.

2 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo en lo de la Historia. Las reescriben los que ganan, de tal forma que ellos terminan siendo los buenos y los que no están de acuerdo son los enemigos de la patria. En la España actual cada comunidad autónoma ha reinventado la suya para resultar la más brillante.
    Un abrazo.

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