Nunca me parece suficiente. Me exijo tanto que los horarios, las distancias, las temperaturas, y las fronteras han quedado reducidas a meras anécdotas. El mundo es mi ruta y mis clientes, estén donde estén, y hablen el idioma que hablen, mi responsabilidad. Soy tan de ellos como ellos de mí en una mágica simbiosis que nos beneficia. Veo al mercado como un ecosistema cuyo equilibrio ambiental depende del oxigeno que aporta la motivación. De joven quise ser guardabosques y, les juro que, sin pretenderlo, he acabado como guardían de un ecosistema en el que la belleza lo rige y lo impregna todo.
Feliz estar en ese plan. Lo que indigna, es que haya dirigentes que sobreponen sus intereses políticos y económicos, a los ambientales, y se jactan de que el calentaiento global es una falacia. UN abrazo. Carlos
ResponderEliminar¡Eres un auténtico crack!
ResponderEliminarTarea inmensa y constructiva la que has asumido! Felicitaciones.
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